El poder de una sonrisa



Toma conciencia del poder sobrenatural que tiene tu sonrisa.

Cuando sonríes, expresas alegría y satisfacción, reduces las hormonas que causan stress y aumentas las que te dan ánimo y placer.
Como la sonrisa es tan contagiosa, todos estos beneficios también los sentirán las personas que te la devuelvan.
Después de trabajar, cuando llegues a casa con tu pareja, mírala a los ojos y sonríe. Sonríele siempre que tengas oportunidad. Está demostrado que las personas que ríen más veces al día, llegan a tener relaciones más felices y duraderas, y en todas las parejas hará falta toda la endorfina que se pueda generar sin recurrir al chocolate.
Cuando medites, sonríe. Pruébalo. Parece simple. Su efecto te sorprenderá.
Mientras más grande y frecuente sea tu sonrisa, mayores serán los cambios positivos que irás notando en tu vida. Vive mejor y más feliz.

El remedio del alma