
NOSOTROS APUNTAMOS DIRECTAMENTE AL CORAZÓN
Nosotros apuntamos directamente
al corazón.
Si la mente intenta entrar a hurtadillas
y tomar el mando,
nosotros le echaremos el lazo
sin demora.
Convertimos el veneno en medicina,
nuestras penas en bendiciones.
Todo lo que nos era familiar,
a quienes amábamos,
y a nosotros mismos,
tuvimos que dejarlos atrás.
Bendito sea el poema que viene
a través de mí,
pero no de mí.
Porque el sonido de mi propia música
ahogaría la canción de amor.
Rumi
